Aunque la estructura de este baño se renovó hace apenas unas décadas, la casa en la que se encuentra cuenta con cuatro siglos de historia, así que durante el proceso de diseño se tuvo muy en cuenta que el espacio debía resultar agradable y funcional pero al mismo tiempo debía integrarse bien con la estética del resto de la vivienda.
Ello condicionó la elección de las cerámicas empleadas, así como también las griferías y el tipo de lavabos y madera.
Los 12 m2 se distribuyeron en tres zonas: una de baño y ducha, otra de tocador, y una tercera de aseo, y cada una de ellas se iluminó específicamente para proporcionar sensación de disfrute tanto de día como de noche.
Resaltar la belleza natural de la estancia y facilitar el uso diario de la misma fueron las premisas con las que se diseñó este baño con un estilo contemporáneo, en una casa muy antigua para una pareja moderna.
